Entre más amó el Principito a su rosa, esta más lo
lastimaba, eso lo animó a viajar, para olvidarla, solo que siempre la llevó con
él.
El mundo está hecho de sueños y fantasías, hay quien las
convierte en realidad, ese es el secreto de las cosas, pero si se acaban los
sueños y las fantasías, se acaba el mundo porque no habrá ya que cosa hacer
realidad.
Todo comienza con un sueño, una fantasía, ese es el
principio, cuando perdemos al niño que llevamos dentro, perdemos los sueños,
las fantasías y la capacidad de asombro y nos parecemos a las máquinas.
El ser humano es mucho más que sangre, piel, vísceras, razón…
el ser humano tiene poder… ¡el poder de amar! Pero la mayoría lo ha olvidado,
lo ha dejado enmohecerse, solo recibe, no da, no alimenta, no siembra, no riega
la plantita, luego se queja diciendo que el amor no existe, que son reacciones
químicas.
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