El mar es un olvido,
una canción, un labio;
el mar es un amante,
fiel respuesta al deseo.
Es como un
ruiseñor,
y sus aguas son plumas,
impulsos que levantan
a las frías
estrellas.
Sus caricias son sueños,
entreabren la muerte,
son lunas
accesibles,
son la vida más alta.
Sobre espaldas oscuras
las olas
van gozando.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario