Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Ángel y diabla

Qué bonito te queda ese lado perverso, aquel que muy pocos conocen y que no cualquiera logra despertar en ti. 

Me encanta tu lado más oscuro y misterioso; aquellos demonios que muy pocos se atreverían a amar, y tu mente que es como una galaxia de orgasmos para mi poesía, y me vuelve loco que seas así, tan diabla en la cama y un ángel en mi corazón.

1 comentario: