Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Voy a desafiar la norma

¡Al fin llegaste, Amor!
Llegaste con tal intensidad
que me causa más vergüenza
negarte que afirmarme.

Cumplió con su palabra Amor,
te acercó a mí.
Conmovido por mis cantos,
te trajo Amor a mi regazo.

Me alegra haber cometido esta falta.
Revelarlo y gritarlo.
No, no quiero confiar mi placer
a la estúpida intimidad de mis notas.

Voy a desafiar la norma,
me asquea fingir por el qué dirán.
Fuimos la una digna del otro,
que se diga eso.

Y la que no tenga historia
que cuente la mía.´

No hay comentarios.:

Publicar un comentario