Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

LA POESÍA ESTABA EN UNA PERSONA

A veces también se quedaba callada y su silencio se convertía en un idioma que sólo ella y yo entendíamos. El verla mirar, sonreír, esbozar gestos y ademanes inconscientes era una razón para estar agradecido. Nadie dijo nunca que dos personas se entienden más cuando callan que cuando hablan, Quizá no lo dijeron porque sabían que aquella magia sólo ocurría una vez en la vida y que, una vez descubierto el secreto, aquel instante huye de nosotros hasta convertirse en recuerdo. Nada nos dijeron de que cuando dos personas se encuentran con la mirada en mitad de un caos horrible, se crea una extraña calma. Esa sensación que despierta en ti partes que no sabías que tenías dormidas. Y entonces lo comprendes: que las palabras no es que sobren, sino que a veces simplemente no hacen falta para describir nada. Que el momento en que todo se da es único. Que la poesía (y hablo de la verdadera) no estaba en ningún libro; que todo este tiempo había estado en una persona. Que quedarse callado es otra forma de gritar que nunca antes habías sido tan feliz en toda tu vida. 

No hay comentarios.: