Algún día estarás muy cerca de mí,
yo robándote besos y tú un espacio
en mi cama; despertando a mi lado
cada mañana y compartiendo de
mi mano un helado, un atardecer
y una vida. Pronto esta distancia
desaparecerá y entonces tú y yo
seremos como almas gemelas,
sí, como dos cómplices que se
aman con locura y sin medida.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario