LA MAGIADEL AMOR

Yo te recuerdo inalcanzable, soñadora

como un ave huyendo al cielo;

te recuerdo caótica, preciosa,

como una flor resistiendo a la lluvia.

Te recuerdo misteriosa, profunda

como un océano virgen,

como el cielo infinito,

como estas palabras

sonando impetuosas

en el interior de tu mente.

A veces te recuerdo sin recordarte

y te quiero sin quererte todavía,

otras veces te olvido sin olvidarte

yte amo sin amarte para siempre.

Luego la fugacidad del sentimiento

me roba las emociones en la noche

yel amor crece sin mi permiso

para odiarte sin saber cómo hacerlo

y para extrañarte queriéndote de vuelta.

Si vuelves no habrá noches con insomnios

y todos los que habría serían contigo;

si vuelves no habrá días de caminatas a solas

y las que habría serían por ir a buscarte.

Sin descanso, como es que debe construirse el

amor;

sin pausas, como es que debe disfrutarse la vida.

Y hacer de todo magia T ensueño,

ser ave y serpiente según tus deseos,

agitar las alas para llevarte lejos,

o serpentear para descubrir tus caminos.

Al final terminaría por aumentarles a mis años

todas las vidas que viviré a tu lado;

aumentarles la fuerza a mis brazos,

aumentarles la esperanza a mis sueños,

aumentarles el alcance a mis palabras,

aumentarles la profundidad a mis silencios,

para que cada vez que te vuelva a abrazar,

cada vez que te sueñe, te hable o me calle;

todo lo que fuera para ti, aunque sea por la mitad.

pueda experimentarlo el doble.

Y quitarles la memoria sensorial a mis manos,

quitarles la emoción a mis ojos,

quitarles el sabor a mis labios,

quitarles la musicalidad a mis oídos,

para que cada vez que te oiga hablar,

cada vez que te vuelva a besar,

cada vez que te vea y te sienta,

cada vez que te toque despacio y con ansias,

con esa firmeza de no querer que te vayas,

con esa urgencia de necesitar que regreses...

para que cada vez que te viva

lo sienta todo como si fuera

la primera vez que lo hago.

Esa es la magia del amor que te prometo

Es tan maravillosa que asusta

tal vez por eso te fuiste.

Es que tú nunca llegaste a entender

que el truco de esta magia

era saber que no había ninguno,

que era todo tan real, precisamente

como las cosas que casi nunca lo parecen.