Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Encuentro II

Ella: Sonrío… cuando me enamoras
Él: ¿También cantas?
Ella: Todo el tiempo y lo gozo y la gente lo nota
Él: ¿Y das grititos?
Ella: Muchos y también saltitos de corazón
Él: ¿Y suspiras?
Ella: De aquí a la luna y despierto a mis vecinos por el ruidito
Él: ¿Y dices bajito mi nombre?
Ella: Tu nombre si, pero cuando voy por la calle te digo fuerte que te amo
Él: Conozco bien ese sentimiento, lo conozco porque ¡me pasa lo mismo!... cuando pienso en ti…

No hay comentarios.: