COMO SI NO EXISTIERAS

A veces me gusta amarte, 

como si no existieras, 

como si nunca te hubiera visto, 

como si nunca besádome hubieras.

Y no lo hago por otra cosa

Que por darme de una vez cuenta,

Que te amo, no por lo que eres,

Sino por lo que en mí fomentas.

A veces, fomentas sonrisas, 

De esas que no se borran ni con la tormenta,

A veces fomentas lágrimas,

Lágrimas de felicidad y de bonanza que alimenta.

A veces fomentas ansias, 

Ansias de besarte, de sentirte al lado,

A veces, fomentas sueños,

Sueños de caballos alados.

Otras veces fomentas realidades,

Realidades de revueltas,

De vuelcos del corazón

 y de lejanías no absueltas.

Otras veces fomentas ilusiones,

Deseos de futuros 

Que a tu lado satisfagan pasiones.

A veces me gusta amarte,

Tal cual si no existieras,

Como deseo de amarte tanto,

Que te amaría, aunque no vivieras.

A veces me gusta amarte,

Tal cual si no existieras,

Porque amarte más no es posible, 

Estando viva en esta tierra.

Y me gustaría amarte más,

Amándote el espíritu, la idea;

Inventándote toda de nuevo,

Inventando que no llenas todo el planeta.

Porque amarte existiendo, es amarte tanto,

Que llenas toda luz, toda sombra, toda cubierta,

Porque has llenado ya tanto, 

Que tanto amor no me cabe siquiera.

Y así, soñando que no existes, te amo,

Soñando que tu amor me alimenta,

Imaginando que no estás,

Que tu presencia no me llena.

Y así, soñando que no existes, te amo tanto,

Que amarte más quisiera;

Soñando que no estás, llenando el mundo de encanto,

Soñando que descubro, de amarte más, otra manera.

A veces me gusta amarte

Como si no existieras,

Para amarte un poco más,

Para llenarme de quimeras.