Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

No me detengo

Ya no me detengo a desmentir los rumores de los chismosos, preñero mantener mis emociones en reposo.
Ya aprendí a no perder mi tranquilidad por cualquiera y a gastarme la vida a mi manera.
Paso de lo ordinario y del convencionalismo de la gente, ser como soy es mi mejor estampa y no me apetece cambiarla por nada.

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