Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

En estos tiempos de cartón

En estos tiempos de cartón, donde el amor se paga con plástico y los besos no se reciclan, nadie quiere querer por miedo a perder. Como si en el amor uno pudiera algo menos que zambullirse de cabeza después de haberla perdido. Amar siempre vale su tiempo, aunque el tiempo del amor pueda acabarse. Uno sufre por eso que amó, sin entender que el vacío que siente también es amor. Nadie llora porque el amor se terminó, sino porque todavía no. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario