El momento inevitable de decir adiós, amor, llegó cuando nuestros días juntos llegaban a su fin. Las palabras pululan en mi pecho mientras trato de encontrar las palabras adecuadas para describir la agonía que me consume. Nuestras almas se enredaron como hilos de seda en el telar del destino, y ahora el tiempo nos obliga a desatar los nudos que nos atan.
Recuerdo aquellos momentos en que el amor cubría nuestros cuerpos como una cálida manta mientras reíamos e intercambiábamos miradas de complicidad. Las hojas de otoño, sin embargo, ahora caen en silencio, despidiéndose de cada soplo del viento a medida que cambian las estaciones.
Eran besos arrebatados a la noche, caricias olvidadas en la infinitud del tiempo. Ahora que nos acercamos a nuestro último adiós, debo soltar tus manos y dejarte volar hacia un territorio desconocido, mientras me pierdo en la tristeza de tus recuerdos.
Me despido de ti mientras me siento a la vez agradecido y deprimido. Valoro cada latido que intercambiamos y cada sueño que arrullamos juntos. Ahora debemos extender nuestras alas y volar de forma independiente en busca de nuestros propios destinos.
Guardo en mi pecho el sonido de tu risa, la tersura de tu piel y el olor de tus abrazos. Serán conservados como tesoros para que los muestre cuando la nostalgia venga a visitarme en noches solitarias en mi cofre de recuerdos.
Juro no aferrarme a los restos de un amor que ha pasado como la niebla del amanecer. Sigo adelante a pesar de tener el corazón roto porque sé que decir adiós es el comienzo de nuevas posibilidades y emociones por explorar.
Como resultado, al decir adiós, gano el coraje para empezar de nuevo. Cierro las puertas a lo que fuimos para dejar espacio a lo que seremos. En cada despedida, un amanecer nos espera en el otro extremo, aunque el camino se vuelva empinado y mis ojos comiencen a llenarse de lágrimas.
Me despido de ti y gracias por todo, amor. Nos separaremos, pero nuestros lazos intangibles, que solo el alma puede percibir, nos mantendrán conectados. Que encuentres alegría en cada paso que das, y que yo encuentre alegría en el nacimiento de mi propia vida.
Adiós amor. El tiempo nos enseñará a curar heridas ya valorar los recuerdos sin dejar que nos consuman. Hoy es una despedida, pero mañana traerá paz y la perspectiva de un nuevo comienzo.
😔🥺😥
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