Ella tiene el poder de seducir mi mente
con palabras,
ella es el alma de mis poemas
ella es mi vicio secreto...
y eso es lo que lo hace doblemente
apasionante y llena de deseo.
Es el poder de su peligrosa ternura
lo que domina mi pluma;
me devuelve a la existencia
con un suspiro robado a la vez.
Por eso ando sediento
sediento solo de ella...
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