Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Dormir contigo... enredado

Llega el momento de dormir, momento mágico lleno de ilusión y fantasía que cierra el día... contigo.
 
Acaricio tus cabellos hasta que tu respiración pausada y tus suaves suspiros me indican que estás dormida.

Abrazados sintiendo tu calor, voy quedando dormido, dejando que la noche nos envuelva como mudo testigo del amor que nos cobija.

Nuestros sueños, anhelos y fantasías se unen, haciéndose una sola realidad mientras abrazados dormimos.

En ocasiones despierto para verte dormir, serena, tranquila, feliz y enamorada. Entonces beso tu frente, tu nariz y tus labios suavemente, con ternura intentando no despertarte, sé de la fragilidad de tu sueño y la dificultad para conciliarlo. Me sientes y me aprietas fuertemente a tí, no quieres separarte, ni siquiera un milímetro, así me demuestras tu amor.

Tú solo suspiras como respuesta a mis caricias, me descubro atrapado, enredado en tus brazos y tus piernas, piel con piel, desnudos, sintiendo tu calor, fundidos nuestros cuerpos en uno solo.

Vuelvo a dormir, amándonos después de amar, ahora en compartidos sueños, al despertar... al amanecer, nuestros cuerpos como uno solo... seguimos amándonos.

Eres un sueño vuelto realidad.

No hay comentarios.: