Lo mío contigo es conocer pueblitos, tirar moneditas en las fuentes de las plazas y pedirnos de deseo el uno al otro, almorzar en los puestos de gorditas, terminar con una nieve de coco para el postre y las sonrisas desbordando. Y caminar por los callejones, y darnos de besos en cada calle, y despertarnos empiernados, y agarrar carretera hacia ningún lado para que me entiendas que el destino del viaje a tu lado es lo de menos. Dedicarte canciones, hacerte chilaquiles en la cruda, besarte en la frente, bailar aunque no sepa un carajo, robarme las florecitas de las macetas y adornar tu melena, ponernos borrachos de vez en cuando y cambiarte el foco cuando te apagues, porque sin pedos, yo no me muevo de tu lado ni en tus peores momento. Lo mío contigo es despertar cada mañana con tus cabellos en la cara, escabullirme a la cocina sin que te des cuenta, prepararte el café y unos hot cakes, regresar al cuarto, verte dormida sin querer levantarte y no creérmela que te tengo.
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