Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

El miedo

Y si te cruzas por ahí con el miedo, no cierres los ojos y bésalo. Agárralo fuerte del pelo y muérdele el labio de 
abajo hasta sacarle sangre y arrancarle 
el aliento. Y si te llama loca, dale las gracias, y págale con esa sonrisa malvada que tanto amo y los labios llenos de rojo.

:D

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