Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

La noche

La noche es un charco de recuerdos, 
sus benditas aguas veneno son. Fúnebre silencio y sueños rotos, desilusión y abandono.

Las cenizas del pasado lastiman 
y me dejan ciego por un instante.

Me hundo en mi cuando la luna pinta 
con su brillo esta habitación, 
la cama y mi alma.

No sé cuántos enigmas habitan 
en la noche, 
más ella parece conocer los míos. Noche, amante silenciosa, 
noche, bella amante tatuada de estrellas, 
por favor, nunca te vayas.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario