Me juro a mi mismo
cuando me la cruzo por la calle
que es a ella -y no a otra-
a quien solía hacerle el amor.
Pero Ios ojos con los que me mira,
de aquellos días, yo no Ios recuerdo; ellos a mi tampoco.
Nos conocemos, sí. Pero ya casi
-casi-
no nos acordamos de qué.
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