Yo no te olvido, habitas en un lugar donde nadie puede tocarte, donde nadie sabe que existes, donde nadie puede herirte, ni yo con mi olvido, ni tú con tu ausencia.
Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.
No quiero escribir poesía
Hoy no quiero escribir poesía en tu pecho, quiero el bombeo de tu corazón acelerado. Quiero tu cuerpo sobre el mío entrelazado, tus jadeos en mi oído tu vientre inundado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario