Yo no te olvido, habitas en un lugar donde nadie puede tocarte, donde nadie sabe que existes, donde nadie puede herirte, ni yo con mi olvido, ni tú con tu ausencia.
Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.
Un día llegará
Un día llegará, la muerte a nuestros ojos, a nuestras manos, a nuestro sexo, a nuestra piel.
Ese día, ya no reirán más las canciones, ya no bailarán más las sonrisas, y ya no habrá más vacilaciones, entre tu alma y mi ser.
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