Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Que haré sin ti...

¿Qué haré sin ti?
No, no es una pregunta al vacío, es una pregunta muy directa para mí. Una pregunta con una muy clara respuesta. 
Sin ti, seguiré mi vida, tal y como era antes de conocerte. 
Seguiré cantando, seguiré riendo, seguiré viviendo. 
Seguiré y ya. Porque yo he nacido sin ti, y puedo estar sin ti.
No pasa nada. Nadie es indispensable.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario