Cuando un hombre quiere una mujer
y la quiere con él realmente,
deja a un lado todo su mundo
y hace cualquier cosa para hacerla suya.
No hay miedos,
distancias,
excusas,
problemas.
No hay nada.
Porque no tendría tiempo
para pensar todas esas cosas.
Su único pensamiento es “quiero a ella”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario