Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Piropo

Te veo por la tarde con tu cabello recogido y no dejo de pensar en lo afortunado que soy. Estás a piel viva, llevando contigo esa gran responsabilidad de pasear mi esperanza en tu mirada -mujer- bella te digo todos los días, te digo en mi idioma y a besos lo mucho que me gusta tu cintura, te lo digo a susurros bailarines -mujer- que hermosa te queda la libertad de no ser mía, ese don de gobernar tu cuerpo, de soportar la carga, de no tener miedo, es delirante saber que te entregas a mi... Sin dejar de ser lo único que necesitas para ser... La chica de cabello recogido que veo despertar en mi cama.

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