Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

ERES MUSA

Eres musa, señorita. Musa de suspiros, musa de miradas furtivas, musa de sueños que se evaporan al primer contacto con el resplandor de la mañana. 

Eres también musa de recuerdos, porque aunque nunca nadie te haya tenido, sé que más de uno pasa los días recordando ese pasado pasado a tu lado que nunca nunca existió, como un préstamo pagado por adelantado. 

Eso, al menos, es lo que ocurre conmigo. No recuerdo este lugar antes de ti. Yo comencé a ser consciente de lo hermosa que es la vida justo en el instante de saber de tu maravillosa existencia.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario