Una copa de vino en mi mano,
bajo la luna llena,
sola, sin compañía,
mi sombra es mi única amiga.
La luna no sabe beber,
mi sombra no puede acompañarme,
juntas, sin embargo,
celebramos la noche.
El viento sopla, la luna brilla,
las luces de la ciudad a lo lejos,
mi pensamiento viaja por el viento,
buscando un destino,
levanto mi copa y digo salud.
Ya es hora
mi sombra y yo nos despedimos,
el viento y la luna no se van,
sólo mis emociones, mis silencios, mi sombra y yo.
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